Hace un año que cambió la vida como la conocíamos.
La declaratoria de estado de emergencia sanitaria a causa de la pandemia generada por el COVID-19 vino acompañada de la primera cuarentena y un largo camino de interacción con nosotros mismos, con nuestros seres queridos y con personas que incluso no conocíamos.
Desde entonces todo se puso cuesta arriba, las enfermedades, las muertes, el desempleo, el hambre, el miedo, el distanciamiento social y para muchos, un encierro físico y emocional que significó la depresión y el distanciamiento de todo lo familiar.
Hoy, un año después, desde Soluciones Conjuntas, reflexionamos una vez más sobre la importancia de buscar soluciones, y en este contexto donde sentimos que todo nos sobrepasa, nos damos cuenta que aún lejos de encontrarlas, vamos juntos en el proceso dándonos ánimo en que las construiremos. Es igual de necesario agradecer y preservar el esfuerzo de acompañarnos en un camino incierto y demandante. Este camino nos ha dado y continúa brindándonos lecciones importantísimas y de formas distintas de hacernos presentes aún a la distancia, de reconocernos vulnerables y de pedir ayuda.
Esta semana le dedicamos un homenaje a las personas que lograron distintas formas de seguir juntos y de avanzar en este camino.
Te invitamos a reflexionar en que a lo mejor no solucionamos circunstancias complejas, pero tampoco nos paralizamos, no paramos y seguimos hacia adelante gracias al impulso de quienes nos acompañaron, y hoy nos recuerdan que se puede seguir avanzando, aunque no parezca.
Más que la solución, este año valoramos el aprender a caminar juntos.
Escribe: Silvana Caro V., Directora Ejecutiva Soluciones Conjuntas